Cómo planificar el marketing para una tienda online
Las tiendas virtuales presentan una serie de ventajas innegables frente a las tiendas tradicionales. La primera de ellas es todo el ahorro de costes que supone en materia de logística y distribución. En el primer caso, la logística se reduce al almacén principal de la tienda, desde el cual parten todos los pedidos hacia sus respectivos destinos, los domicilios de los clientes que han realizado los pedidos. Con respecto a la distribución, una tienda online que vende, como su nombre indica, exclusivamente a través de internet, no deberá pagar comisiones de distribución a medianas y pequeñas superficies. En otras palabras, todo son ventajas.
Pero todo tiene su cara oculta o su «pero», y en este caso es la realidad innegable de que la competitividad de empresas en internet es feroz. Gracias a técnicas básicas de SEO o a las redes sociales, cualquier negocio, sea grande o pequeño, tiene las mismas posibilidades de visibilidad y de captación de clientes en internet si lleva a cabo una buena campaña de marketing, o contrata a una consultora SEO eficiente que lleve a cabo el proceso. Por lo tanto, lo que con una tienda virtual nos ahorramos en las facetas antes mencionadas, debemos invertirlo en materia de publicidad en internet, lo único que nos garantiza la posibilidad de destacar.
El marketing no se reduce a llevar a cabo una buena estrategia de social media en redes sociales o crear un branding adecuado, con un tono y un estilo que se reflejen de manera convincente en el sitio web de la tienda, así como en su usabilidad y su accesibilidad. El marketing es también las políticas que realicemos aprovechándonos de efemérides, eventos anuales o épocas concretas. Por ejemplo, el Black Friday o el Día sin IVA, momentos en los que las tiendas virtuales pueden hacer su agosto, como suele decirse.
En cualquier caso, todas nuestras acciones de marketing, desde los buscadores y redes sociales hasta lo relativo a ofertas y descuentos, deben estar planificadas. No podemos dejar al azar y a la improvisación algo de lo que depende el futuro de nuestro negocio.