El placer de amueblar nuestra casa

Cuando estrenamos casa, una de las cosas que más nos gusta es cuando toca el momento de comprar y colocar los muebles y demás complementos decorativos y accesorios, cuadros, plantas, alfombras, lámparas, cortinas… Por norma general, dependiendo de nuestros gustos y estilo personal, compraremos muebles de estilo contemporáneo, lo que vendría a ser muebles para el hogar de estilo moderno; o bien, muebles de comedor de estilo clásico, una línea que nunca pasa de moda; o, nos inclinaremos por el estilo vintage, estilo que, por otra parte, está teniendo mucho éxito: mesas de madera decapada, herrajes en puertas de armario para los muebles de dormitorio, maderas envejecidas, tapizados de sillas con estampados antiguos; o, por ejemplo, optar por elegir muebles de dormitorio tipo rústico que, la verdad sea dicha, imprime a la habitación una agradable sensación de calidez.

Si ya de por sí, afirmamos que las prisas nunca son buenas consejeras, a la hora de elegir, comprar y disponer los muebles para el hogar, tendríamos que ser fieles a esa máxima para conseguir un conjunto armónico, bello, confortable y funcional. Porque hay que ser prácticos a la hora de comprar los muebles de dormitorio o muebles de comedor y de salón, sin dejar a un lado lo puramente estético y que resulta cautivador a nuestros ojos, también debemos pensar en la parte práctica ¿De qué nos sirve que un mueble sea encantadoramente bonito, ocupe un espacio y no aporte nada útil? Quizás si disponemos de mucho espacio, sí nos podemos permitir el lujo de colocar un mueble auxiliar en un dormitorio moderno, por ejemplo, que aporte color, diseño y un toque único y distintivo; en estos casos si es una idea factible.

A veces ocurre que, a la hora de comprar muebles para el hogar, nos debatimos entre la razón y el corazón. Lo ideal es buscar un equilibrio entre ambos. 

Antes de comprar tal o cual mueble de comedor, debemos asegurar las medidas. De esta manera, evitaremos errores que nos obliguen a una devolución. Dos o tres centímetros de más pueden hacer que, el mueble en cuestión, tape parte de una ventana o llegue hasta la puerta de acceso y nos impida abrir y cerrar con comodidad.

Tomar decisiones con tino a la hora de comprar muebles para el hogar, nos ahorrará quebraderos de cabeza. Por eso, es imprescindible decidir con tranquilidad, calma y un poquito de razón y otro poquito de corazón.