¿Quieres comprar un dron?
No se puede negar que los drones están de moda. Seguro que a más de uno se le ha cruzado la idea de comprarse uno. Pues bien, pueden ser tan costosos o tan baratos como queramos o podamos. De hecho, los hay desde 20 euros y hasta los 3.000 euros y de ahí a los que ostentan precios mucho más elevados, estaríamos hablando de los que rondan los 80.000 euros.
Claro está, como pasa con todo, que tanta diferencia de precio corresponde a las funciones, calidad y marca de los drones en cuestión; y también responde a la utilidad que se le vaya a dar, si es para uso particular, nos basta con un dron de 800 o 1.000 euros, por ejemplo, pero si su uso es a nivel profesional, ya tendríamos que irnos a los de 80.000 o incluso más.
Habida cuenta que todos sabemos que es un dron. Su definición viene a ser algo así como un vehículo aéreo no tripulado que corresponde con las siglas en español (VANT) y que es dirigido en tierra por medio de un mando. Otros lo llaman, robot volador.
Si queremos comprar un dron para uso personal, con 800 euros que podemos obtener rápida y fácilmente, solicitando unos microcréditos rápidos online; para lo que, previamente, habremos hecho las debidas comparaciones entre unos y otros para dar con el más apropiado para nuestra economía y, haciendo uso de un simulador de préstamos rápidos que nos indique la cantidad justa que vamos a tener que devolver a la finalización del plazo; una herramienta muy práctica que evita que nos llevemos una mala sorpresa.
Dinero en mano, solo tenemos que ocuparnos de buscar en internet todos los modelos que hay, sus características, funciones y, de acuerdo a eso y a nuestro presupuesto, comprar el dron y empezar a disfrutarlo.
De hecho, lo más adecuado, si nunca hemos manejado un dron es comenzar por uno básico y asequible para, conforme vayamos cogiendo destreza y habilidades, pasar a uno de más nivel. El ocio está asegurado, su potente cámara nos permite grabar vídeos y tomar fotografías espectaculares.
Su tecnología y diseño con cámaras, GPS y sensores varios, lo convierten en un artilugio muy atractivo. En un principio, estaban destinados a usos militares; no obstante, ante la expectación que han despertado, se han fabricado drones más pequeños, silenciosos y rápidos para otras utilidades que nada tienen que ver con temas militares.
Por ejemplo, sus aplicaciones se extienden al mundo de la investigación científica, fotografía, monitorización de movimientos sospechosos, búsqueda de personas, controlar incendios y catástrofes naturales, envíos de paquetería a domicilio, o para el simple entretenimiento.
Por cierto y, como curiosidad, terminaremos diciendo que no solo hay drones aéreos, también hay modelos de drones terrestres y acuáticos.