El papel profesional de los Green Belt
Nos encontramos en un mundo global y acelerado y, por desgracia, los acontecimientos inesperados y desagradables a escala mundial, tales como una pandemia o una guerra, nos lo recuerdan constantemente. En una economía mundial, las incidencias financieras de un país se hacen notar en otros, y cada pieza del engranaje tiembla, amenazando con generar un efecto dominó. Por extensión, apreciamos este proceso de efecto mariposa económico también en los negocios y en las empresas, más o menos grandes y, en general, de cualquier sector. El universo digital y la revolución de las telecomunicaciones consecuente ha reforzado esta, todavía, nueva realidad. Por lo tanto, la aparición de los procesos Six Sigma, y de un curso de green belt derivado de él, no debería cogernos por sorpresa.
Antes de seguir, es importante definir con relativa precisión estos dos anglicismos que, en el mundo de los mercados, las finanzas y los negocios, siguen siendo neologismos. Cuando hablamos de Lean Six Sigma, cuya traducción aproximada es «Seis Sigma», nos referimos a un proceso de negocio cuyo objetivo principal es la mejora de procesos y, por ende, de resultados, en cualquier empresa. ¿Cómo? Mediante el análisis riguroso de los datos, el control diario de actividades, la resolución de problemas y errores, y, finalmente, la mejora de la satisfacción final de clientes y usuarios. Como se puede observar, esta definición genérica sugiere que el proceso en cuestión es aplicable a cualquier sector profesional.
El Six Sigma, por otro lado, ha dado lugar a la aparición del papel profesional de green belt, literalmente «cinturón verde». Un green belt es, en resumen, un mediador entre los objetivos referentes al inicio del proyecto Six Sigma y sus resultados; es decir, la persona que facilita todo el procedimiento mediante la recolección de datos, ya mencionada, y su análisis posterior, a menudo a través de la praxis de la diagramación. Por tanto, quien decida formarse en este nuevo papel empresarial, aprenderá todo eso y más; y, si lo desea, también puede plantearse hacer un máster de black belt o «cinturón negro», que, por así decirlo, es un escalafón de responsabilidad superior, siendo el green belt auxiliar. Así funciona el nuevo paradigma empresarial.