Postparto: recuperación y cuidados
Maternidad
La maternidad, ese milagro de la naturaleza que nos hace sentir en un estado realmente inexplicable, un estado para el que no encontramos palabras, todas se nos quedan pequeñas a la hora de describir este hecho tan especial en nuestra vida.
No importa que lográramos quedarnos embarazadas al poco de intentarlo o que nos costara un periodo, más o menos largo, en el que las visitas al cuarto de baño con el Predictor en mano, nos tuvieran un poco más agobiadas de lo normal, a la espera de ese resultado positivo que tanto deseamos. O que, por capricho de la naturaleza, tengamos que recurrir a tratamientos hormonales o a la fecundación in vitro para albergar en nuestro vientre ese hijo tan soñado. Desde el mismo momento en que tenemos la certeza de que estamos embarazadas, sentimos ese algo especial, único, imposible de expresar con palabras. Una vida está creciendo en nuestro vientre y, desde ese mismo instante, ya nos sentimos y somos madres.
Esa misma sensación de sentirse y ser madre también se percibe desde el mismo momento en que nos confirman una adopción. Porque la maternidad no es solo cuestión de vientre, tiene que ver con el deseo de tener un hijo para amarle, cuidarle, educarle, acompañarle, respetarle, consolarle, apoyarle, animarle… y dejarle volar solo.
Embarazo
Vivir el embarazo es maravilloso, son 9 meses en los que sientes esa unión especial entre tu hijo y tú. El momento del parto es la culminación de ese proceso en el que, poco a poco, te vas descubriendo en tu faceta de madre. Cuando por fin tienes a tu bebé en tus brazos, el amor incondicional, verdadero, nace junto a esa personita tan delicada y fuerte a la vez.
Adaptación y postparto
Y ahora viene un proceso tan único como lleno de dudas, incertidumbre, preguntas… Los cuidados postparto son esenciales para lograr un equilibrio en el estado emocional de la madre y, de esta manera, trasmitirlo al bebé. Da igual que hayamos leído libros y más libros sobre cómo entender a tu bebe, como cuidarlo. Que deberíamos hacer y que no. Al final, cada caso es irrepetible y dejarnos ayudar y asesorar y utilizar ciertas pautas, más o menos comunes a la mayoría, nos facilitará el camino de aprendizaje. Los dos, la madre y el niño, inician el camino de adaptación a una nueva etapa.
Hay algunas madres que, incluso se sienten culpables, por sentirse tristes, agobiadas y con ansiedad. Pero no debe haber un pensamiento de culpabilidad, en absoluto, es simplemente adaptación. Y, unas lo llevaran de una forma más sosegada y sencilla y otras, con más nervios, angustia y complicaciones.
Todos no somos iguales, ni afrontamos las cosas de la misma manera, ni tenemos las mismas circunstancias y situaciones. Si el proceso de adaptación al postparto se nos antoja especialmente difícil de sobrellevar y corremos el riesgo de caer en una depresión o ansiedad, debemos acudir a un profesional que nos ayude a gestionarlo de la mejor manera posible. Los cuidados postparto ayudan a mejorar la adaptación de la madre a su nueva situación vital y esto revierte, lógicamente, en el niño. Si el bebé se mueve en un ambiente alegre, relajado y agradable, mejorará la sensación de bienestar y la interacción entre madre e hijo.
El bebé merece toda la atención y cuidados, pero las madres también. Tienen que afrontar una serie de cambios en su cuerpo, en su vida diaria, en sus hábitos… para los que también necesita acompañamiento y comprensión. Los cuidados postparto ayudan a la madre recuperar su cuerpo y a gestionar mejor sus emociones, sentimientos, tareas, adaptación y aceptación.