Agricultura
Tipos de abonos para plantas ¿Cuál elegir?
La calidad del desarrollo de las plantas depende, principalmente, de la composición del sustrato donde se vayan a cultivar. La mayoría de las especies se plantan en la tierra. Esta puede ser más o menos apta para el crecimiento de las plantas, pero siempre va a necesitar la aportación de abonos y fertilizantes. Lo más aconsejable es utilizar abonos orgánicos ecológicos y fertilizantes ecológicos, frente a los abonos y fertilizantes químicos.
Abono orgánico ecológico
Los abonos orgánicos ecológicos contienen sustancias de origen natural que aportan una gran cantidad de nutrientes a las plantas. Estos fertilizantes biológicos respetuosos con el medio ambiente provienen, generalmente, de lombrices y vegetales.
Las plantas los absorben lentamente por medio de sus raíces, pero los metabolizan con rapidez. Por lo tanto, utilizando abonos orgánicos no se corre riesgo de saturar el sustrato.
Abono mineral
Los abonos minerales o inorgánicos son productos químicos concentrados que las plantas asimilan con rapidez. Suelen ser mucho más económicos que los abonos orgánicos, pero su uso requiere mayor conocimiento de agroecología y un control riguroso en la aplicación.
Si se administran con cuidado, los abonos minerales presentan resultados maravillosos en un corto período de tiempo. Sin embargo, errores en la dosificación del producto o la frecuencia de uso pueden saturar la tierra, crear sales, contaminar el suelo y causar problemas en las plantas que, en algunas ocasiones, resultan irreparables.
Los abonos minerales también pueden ocasionar problemas de salud. Por lo tanto, su utilización requiere el uso de un equipo de seguridad especial. Los abonos inorgánicos se pueden conseguir en distintos formatos.
Hay abonos minerales sólidos que se producen en forma de polvo, gránulos o bolitas. Pueden ser simples, de un solo nutriente; o compuestos, con más de un nutriente. Por otro lado, existen abonos inorgánicos líquidos que se diluyen en agua y se aplican mediante el riego.
Abono bio-mineral
Los abonos bio-minerales son fertilizantes híbridos. Contienen una base orgánica y algunos componentes minerales. Esta combinación equilibrada hace que sean un poco más fáciles de utilizar que los abonos minerales, ya que las probabilidades de sobredosificación son menores.
Todos los tipos de abono presentan ventajas. En líneas generales, se recomienda el uso de abono orgánico ecológico, ya que no contamina la tierra y beneficia a todo tipo de plantas.
Los abonos minerales o mixtos deberían reservarse para casos puntuales. Se pueden utilizar cuando el sustrato carece de algún nutriente en particular o las plantas escogidas necesitan un refuerzo especial.